El ingeniero eléctrico, Sebastián Ribadeneira, señaló este viernes que Coca Codo Sinclair practicamente ya pagó su inversión. En una entrevista con Radio Pichincha explicó que la central hidroeléctrica, más grande del país, factura a 1,40 centavos el kilovatio hora y se calcula que desde el año 2016, que entró en operación, hasta finales de 2023, generó al estado un ahorro de 2.300 millones de dólares por la no producción de energía termoeléctrica.
“Entonces durante ese tiempo, esa central prácticamente ya se encuentra pagada por este ahorro”, resaltó el experto, que fue gerente de la Unidad de Negocio Hidroagoyán y director de Substrasmisión de la Empresa Eléctrica Ambato.
Ribadeneira dice que cuando entró en operación Coca Codo Sinclair ya se debió iniciar la construcción no solamente de una, sino de otras centrales hidroeléctricas así como de distintas fuentes energéticas. “Si hubieran iniciado en esa fecha no estuviéramos hablando de apagones”, dijo.
Asegura que em el país existe un retraso de unos 8 años en la ejecución del plan Maestro de Electrificación y que la actual crisis no solo se encuentra en la etapa de generación, por la falta de nuevas fuetes de energía. Ya que la crisis está en trasmisión, porque las líneas de alto voltaje en algunas zonas del país ya se encuentran al límite de carga; crisis a nivel de transformadores porque muchos de ellos, especialmente en las provincias de la Costa ya se encuentran en horas pico trabajando a sobre carga.
También hay una crisis de factor de potencia porque no existen los barcos recapacitores suficientes para regular el voltaje a nivel de trasmisión en las provincias de Manabí, el Oro y Esmeraldas. Y una crisis de distribución porque tampoco se ha hecho las inversiones necesarias en esgte ámbito.
“El problema es integral, el problema es la actual estructura del sector eléctrico ecuatoriano, la cual lamentablemente impide que venga la inversión extranjera que tanto ofrecen”, resaltó.